El conocimiento de cada uno de nuestros cuerpos es el primer paso al autoconocimiento, al igual que la comprensión de que cada uno de nuestros cuatro cuerpos corresponde a un elemento de la naturaleza.
- El elemento TIERRA corresponde a nuestro cuerpo Físico.
- El elemento AGUA corresponde a nuestro cuerpo Emocional.
- El elemento AIRE corresponde a nuestro cuerpo Mental.
- El elemento FUEGO corresponde a nuestro cuerpo Espiritual.
Cuando estos cuerpos están en desarmonía somos incongruentes, estamos desfragmentados y es cuando sufrimos. Porque lo que nuestro espíritu quiere no coincide con lo que pensamos o ni siquiera con lo que sentimos, y en el momento de actuar y tomar acción hacemos todo lo contrario a lo que realmente queremos. ¿Te suena familiar? por esa razón decimos que vivimos en caos. No nos gusta nuestro trabajo, pero sin embargo vamos todos los días, aguantamos relaciones que no nos aportan por falta de honestidad, nos quejamos y criticamos constantemente…
Por esto: “La primera necesidad del ser humano es el autoliderazgo. Autoliderazgo es aprender a liderar nuestro cuarteto interno: cuerpo, corazón, mente y espíritu, para que todos vayan hacia una misma misión” Suryavan Solar.
Liderarte a ti misma es el primer paso, para lo cual debes haber limpiado y purificado cada uno de tus cuerpos:
Haber limpiado lo suficiente tu cuerpo físico; que te sobre energía vital y siempre tengas ánimo, es tener una alimentación sana y un cuerpo fortalecido.
Haber limpiado tu corazón de venenos como la envidia, los celos, parar de compararte y comenzar a tener una verdadera relación contigo misma y con los demás.
Haber limpiado tu mente lo suficiente de pensamientos negativos y de creencias que te limitan y no te dejan avanzar, para convertirte en una persona optimista y que sabe proyectarse de manera adecuada en la vida.
Haberte limpiado de espíritu y comenzar un verdadero camino de crecimiento personal, ganando autoconfianza, autoestima y poder personal, comprendiendo que la mayor autorrealización en la vida es servirte a ti misma y a los demás.
¿Cómo lograr esta armonía entre mis cuerpos y llegar a la verdadera paz interior?
- El primer paso es preparándote, limpiando los venenos internos, limpiando los pensamientos negativos, y los miedos. Comprometiéndote contigo misma a transformar tu vida de una vez por todas.
- El segundo paso es fortaleciéndote, reconocer que a pesar de todo lo que hay que limpiar por dentro, tenemos cosas que sí nos apoyan, habilidades y potenciales para ponerlos al servicio de ti misma y de tu crecimiento.
- El tercer paso es armonizándote, es comenzar el proceso de integración de tus partes fortalecidas, es cuando comienza el proceso de meditación.
- El cuarto paso es expandiéndote, al reconocer tus fortalezas y armonizarlas, puedes entonces comenzar a ponerlas al servicio de ti mismo y de los demás llegando incluso, a tocar y despertar el corazón de muchas personas.
No intentes expandirte si aún no has limpiado tu corazón de venenos, si no has limpiado tu mente de pensamientos negativos, si aún tienes miedos que no has podido transcender, porque entonces estarás expandiendo eso a los demás. Por eso, la etapa más importante es la de la preparación.
El sonido, y en especial los Cuencos Tibetanos, tienen una gran ventaja porque apoyan a que tus cuerpos se alineen y comience la congruencia; favorece que tu mente se calme y obtengas mayor claridad, a que entres en espacios de quietud y comprendas la verdadera raíz de tus emociones. El sonido sagrado de los Cuencos te apoya a que te proyectes mejor como persona, a que puedas visualizar con claridad esa persona en la cual te quieres convertir bajo principios y valores. Te apoya con la guía correcta a que te construyas a ti misma desde una base sólida.