Al igual que tenemos una víctima interna también está nuestra victimaria interna, pues la una no puede existir sin la otra. En el blog pasado hablamos de la víctima interior ahora es el turno de observar detenidamente a la victimaria.
¿Que hace la victimaria interna?
La victimaria interna es aquella voz que nos reprime y nos dice que todo lo que estamos haciendo lo hacemos mal, que no somos lo suficiente, que estamos gordas o que nadie nos va a querer. Es decir ella es la encargada de bajarnos nuestra autoestima, aprovechándose de las heridas de la infancia cuando alguna vez nuestra madre nos hirió o cuando en el colegio nos hicieron bulling. Ella repite constantemente esos episodios en forma de creencias en nuestra cabeza atormentando a la víctima interior (quien se las cree todas)
La victimaria y nuestras heridas
Todas tenemos heridas, y es nuestro deber detectarlas para no seguir con los patrones de baja autoestima y hacer un cambio real en nuestras vidas. Si trabajamos nuestras heridas, dejamoa de alimentar a la victimaria, y sin victimaria no hay víctima.
Puede que el el colegio algún profesor nos hayan dicho 1 vez que éramos brutas, pero la victimaria interna ha sido la encargada de recordarnos y repetirnos esa frase constantemente en nuestra cabeza una y otra vez hasta el punto que se convierte en una afirmación “ Soy bruta” y entonces hemos vivido varias años de nuestras vidas con esa afirmación en la cabeza, creyéndola.
Lo mejor que podemos hacer es observar y escribir todas esas heridas y creencias que nos bajan el autoestima, pues al escribirlas en un papel comenzamos a separarnos de ellas.
No somos lo que creemos que somos
Lo importante acá es observar que no somos ni la victimaria, ni la víctima interna. Es decir yo debo aprender a separarme de la victimaria la que dice “ eres bruta” “eres gorda” y la víctima que es la que cree todo eso. No somos ninguna de las dos. Si seguimos creyendo que somos la victimaria o la víctima seguiremos en una lucha constante dentro de nuestras cabezas. La realidad es que somos mucho más que una serie de pensamientos que pelean entre sí, somos nuestros talentos y nuestro máximo potencial. De hecho la función de la victimaria y la víctima es justamente esa, no dejar que esos talentos se expresen.
Verdades sobre la victimaria:
- Siempre quiere tener el control y la razón.
- Nos reprime
- Nos dice la mas grandes mentiras
- Es la causante de nuestra depresiones (gracias a que la víctima las cree)
- Nos distrae para que no expresemos lo mejor de nosotras
En resumen, autoestima es aprender a detectar el juego entre la víctima y la victimaria interior y no jugarlo, es aprender a desidentificarnos y encontrar lo que realmente somos.